Los envíos dentro de la Unión Europea están exentos de gastos de aduanas.
Los envíos fuera de la Unión Europea pueden estar sujetos a pagos de aduana. Estos impuestos son exigidos por las autoridades locales y son responsabilidad del cliente.
Considere que, en caso de ser necesario, usted deberá pagar los aranceles de importación cuando las autoridades nacionales de su país los facturen. O bien en el caso de que las aduanas de España lo estimen oportuno.